El consentimiento sexual es un acuerdo para participar en una actividad sexual. Antes de mantener relaciones sexuales con otra persona, debes saber si esta persona está de acuerdo.
Consentir y pedir consentimiento consiste en establecer tus límites personales y respetar los de tu pareja. Debes volver a preguntar si las cosas no están claras. Para que sea algo consensuado, ambas personas deben estar de acuerdo en tener relaciones sexuales, TODAS y cada una de las veces.
Sin consentimiento de alguna persona, la actividad sexual (incluido el sexo oral, tocar los genitales y la penetración vaginal o anal) es agresión sexual o violación.
El consentimiento tiene las siguientes características:
Se da libremente.
- Consentir es una opción que se toma sin presión, sin manipulación o sin la influencia de las drogas o el alcohol.
Es entusiasta.
- Cuando se trata de relaciones sexuales, debe hacer las cosas que DESEAS hacer, no lo que se espera que hagas.
Es específico.
- Decir que sí a algo (como ir a besarse al cuarto) no significa que aceptes hacer otras cosas (como tener relaciones sexuales).
Se brinda estando informado.
- Sólo puedes consentir algo si tienes toda la información al respecto. Por ejemplo, si alguien dice que usará un condón y luego no lo hace, no hubo consentimiento total.
Es reversible.
- Todos pueden cambiar su forma de pensar sobre lo que desean hacer, en cualquier momento. Incluso si ya lo hicieron antes y ambos están desnudos en la cama.
Tú tienes la última palabra sobre lo que pasa con tu cuerpo.
- No importa si ya lo hicieron o incluso si dijiste que sí antes y luego cambiaste de parecer. Tienes derecho a decir “NO” en cualquier momento, y tu pareja debe respetarlo.
El consentimiento siempre se debe comunicar con claridad.
- No debe haber margen de duda ni misterios. El silencio NO es consentimiento. Esto es importante cada vez que estés con alguien.
Existen leyes que indican quiénes pueden consentir y quiénes no.
- Las personas que están ebrias, drogadas o inconscientes no pueden consentir en tener relaciones sexuales. También existen leyes que protegen a los menores, personas de menos de 18 años, contra la presión que puedan sufrir para tener relaciones sexuales con una persona mucho mayor que ellos.
- Los adultos que tienen relaciones sexuales con personas cuya edad es menor a la edad de consentimiento legal corren el riesgo de terminar en prisión y de quedar registrados como agresores sexuales.
Si tienes más preguntas habla con tu médico o un Centro de Salud local para más ayuda.