Todas las mujeres valemos y tenemos poder. Todas tenemos derechos sexuales y reproductivos, y en el mundo existen múltiples organizaciones internacionales que se encargan y toman el tiempo de certificar y luchar por nuestros derechos.
Los derechos sexuales y reproductivos de la mujer son conjunto de principios y normas que permiten que regulemos nuestras relaciones con los demás de manera justa y ordenada. Aquí te mostramos los 12 derechos sobre nuestra salud, seguridad, educación y maternidad, para que estemos informadas:
Sobre nuestra salud
- Derecho a la vida: las entidades gubernamentales tienen la obligación de garantizar y crear las condiciones necesarias para que tanto hombres y mujeres no mueran a causas que pueden evitarse. En este caso, se busca poner como objetivo a la mujer para que no muera por razones relacionadas al parto y al propio embarazo, sobre todo si es posible evitar cualquier riesgo.
- Derecho a la salud: La mujer puede disfrutar de una vida sexual satisfactoria, plena y libre. Sin riesgos de procrear y con la libertad para decidir si hacerlo o no, cuándo y con qué frecuencia. Además, se entiende que tanto el hombre como la mujer tienen derecho a obtener información sobre planificación familiar y métodos para regular la concepción que sean legales en cada país.
Sobre nuestra seguridad
- Derecho a la libertad, seguridad e integridad personal: La convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer, en su artículo 1, declara que es indispensable erradicar y eliminar cualquier tipo de conducta o acción basada en el género que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer. Esto abarca los ámbitos tanto públicos como privados.
- Derecho a la igualdad y a la no discriminación: Dentro de los tratados de los derechos universales, se busca ver a la mujer como un igual ante la ley, la salud, la sociedad y que se le proporcione las mismas oportunidades sin importar la raza, el color, el sexo, el idioma, la religión, la opinión política o de otra índole, el origen nacional o social, la posición política, e, incluso, la orientación sexual.
- El derecho al empleo y a la seguridad social: Este derecho busca la protección legal de la maternidad dentro del área laboral, promover un ambiente libre de acoso sexual y a no ser discriminada por estar embarazada.
- El derecho a modificar las costumbres discriminatorias contra la mujer: La Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW) establece que las entidades gubernamentales deben velar por ambientes libres de discriminación y, sobre todo, que debe tomar medidas al respecto para modificar cualquier costumbre o traición que promueva ese comportamiento. Por ello, se promueve adoptar todas las medidas adecuadas, incluida el área legislativa, para modificar o derogar leyes, reglamentos, usos y prácticas que constituyan discriminación contra la mujer. A su vez, derogar todas las disposiciones penales nacionales que constituyan la discriminación contra la mujer.
Sobre nuestra vida personal y maternidad
- El derecho a decidir el número e intervalo de hijos: También se le conoce como el derecho a la autonomía reproductiva. Explica que toda mujer es libre y responsable del número de sus hijos y los intervalos entre los nacimientos. A su vez, se busca el acceso a la información, la educación y a los medios que permitan ejercer estos derechos.
- El derecho a la intimidad; Este derecho busca empoderar a la mujer a que decida sobre su cuerpo y su capacidad reproductiva. Invita a que se también se resguarde la seguridad personal, física, psicológica y sexual de cada mujer. Además, incluye la confidencialidad entre médico y paciente, y cualquier tratamiento reservado a la privacidad.
- El derecho al matrimonio y a fundar a una familia: Toda mujer tiene derecho a contraer o no matrimonio. Debemos recordar que esto debe tener consentimiento y un mínimo de edad establecido dentro de cada región. Además, la pareja no tiene porqué limitar la decisión de tener o no hijos sin importar el estado civil. Con esto, se busca incentivar evaluar las edades dentro de las leyes y considerar una mejor, pues muchos países latinoamericanos promueven y consideran el casamiento siendo menores de edad.
Sobre nuestra educación
10. El derecho a la educación sexual: La educación y la información es parte fundamental para que la mujer se empodere de su cuerpo y de sus decisiones. Por ello, se busca que toda mujer tenga acceso a educación sexual y reproductiva. Esto incluye información acerca de formas de protección sexual, métodos para una reproducción sana, segura y responsable, y la posición cultural en diferentes partes del mundo. Además, se relaciona con la posibilidad de la educación integral para los hombres que promueva ejercer su sexualidad y paternidad de manera responsable. Es decir, no solo concentrarse en el uso de condón y la vasectomía, sino el compromiso de ejercer sus derechos.
11. El derecho a la información adecuada y oportuna: Toda mujer tiene derecho a recibir información clara sobre su estado de salud, sus derechos y responsabilidades en materia de sexualidad y reproducción. Además, tener claro los beneficios, los riesgos y la efectividad de los métodos de regulación de fecundidad y sobre las implicaciones que tiene un embarazo.
12. El derecho a disfrutar el progreso científico y a dar su consentimiento para ser objeto de experimentación: Se trata de un derecho que promueve el avance científico. Buscar el poder disfrutar el progreso científico en el área de la reproducción humana, como la manipulación genética y fecundidad artificial. Así como también se tiene el derecho a no ser objeto de experimentación o abuso a cualquier sector vulnerable de mujeres, si no está esclarecido el consentimiento o si los resultados son usados sin aviso.
Las mujeres tenemos una voz que podemos aprender a usar para que beneficie nuestra vida y así sea más sana, libre y fuerte. Nuestros derechos están en nuestras manos y es nuestro deber es hacernos cargo de ellos para ser mujeres responsables y comprometidas con nuestra sexualidad.
Recuerda buscar espacios de apoyo donde puedas aprender más sobre este tema y que puedas sentirte segura de conocer más sobre tus derechos como mujer.